Revista de descontaminación industrial, recursos energéticos y sustentabilidad.

A propósito del Dow Jones Sustainability Index

Herman Chadwick
Presidente del directorio Enel Chile



Col-Herman Chadwick 300
"Lo que no se define, no se puede medir. Lo que no se mide, no se puede mejorar; y lo que no se mejora, se degrada siempre". Esta frase del físico y matemático británico William Thomson Kelvin, que fue conocido como Lord Kelvin a fines del siglo XIX, resuena hoy en las empresas de todo el mundo con más fuerza que nunca, sobre todo la parte que dice: "Lo que no se mide, no se puede mejorar".

La medición es clave para las estrategias de sostenibilidad empresarial. Un sector crítico, donde si no medimos estamos degradando nuestro negocio, la propia sociedad y el planeta.

En los últimos años, las empresas han alineado sus estrategias a diferentes metas, como la establecida por el Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1,5 °C, a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) planteados por las Naciones Unidas o a cumplir con las metas ESG, de medioambiente, sociedad y gobierno corporativo.

Desde la cabeza del directorio de Enel Chile estamos comprometidos con cada una de estas metas, que son las que nos guían hacia la sostenibilidad. Con el tiempo, he aprendido que para alcanzarlas, hay que hacerlo desde la alta dirección para incorporarlas en el ADN de la compañía. Además, establecer objetivos y dar pasos que involucren a los distintos estamentos de la empresa, todos incluidos en un plan de sostenibilidad corporativa.

Este va mucho más allá de las declaraciones o buenas intenciones; el plan es concreto y tiene cambios o pasos, que a veces son difíciles de dar, pues, a simple vista, pueden afectar los resultados en el corto plazo.

Para dirigirnos en el camino de la sostenibilidad están las herramientas de medición, ojalá manejadas por un tercero, que nos muestran avances y fallas para hacer ajustes o cambiar el rumbo cuando es necesario.

Cada año, desde 1999, el termómetro de la sostenibilidad empresarial lo da el Dow Jones Sustainability World Index (DJSI), que rastrea el desempeño de compañías abiertas en bolsa, en distintos sectores industriales y diversos lugares del mundo, en cuanto a criterios ambientales, sociales y de gobernanza. Hace 8 años llegó a nuestro país.

Recientemente, Enel Chile fue confirmada en el primer lugar del sector Utilities en las tres categorías de este índice en las que puede estar presente: Emerging Markets, Mercado Integrado de la Alianza del Pacífico (MILA) y Chile. Lo digo con orgullo, pero además invito a las empresas a transparentar su política ambiental; mostrar la circularidad de sus procesos, las alianzas de reciclaje y la reducción de su huella de carbono, reportando y gestionando su impacto. Asimismo, a tener una gobernanza robusta, con equidad de género, capacitación permanente en el directorio y gestión de riesgos, entre otros. Por último, dar relevancia a las políticas de vinculación con todos sus stakeholders, entre ellos colaboradores, clientes, proveedores, comunidades, inversionistas y autoridades, para aportar al desarrollo social sostenible.

Sin olvidar que el plan debe ser guiado desde los directorios, incorporado en todas las áreas de la compañía, y atreverse, medirse y generar un triple impacto que será el que –estoy seguro– dará viabilidad a las empresas.

Columna publicada en InduAmbiente nº 185 (noviembre-diciembre 2023), página 87.