Así como se reciclan y reutilizan vidrios, plásticos, cartones y muchos otros productos que cumplieron su vida útil, ¿por qué no hacer lo mismo con los diversos y muchas veces voluminosos materiales empleados en la industria de la construcción? O sea, con aquellos residuos provenientes de edificaciones, excavaciones, sistemas viales, urbanizaciones y caminos, fundamentalmente.
Un grupo creciente de empresas ha visto una oportunidad de negocios en este ámbito y trabaja para darle a los desechos en cuestión un destino más sustentable. Por ejemplo, “Voladuras y Demoliciones” ofrece los servicios integrales de excavación + reciclado, “dado que los materiales procedentes de las excavaciones en roca son idóneos para la producción de áridos artificiales de gran valor añadido y excelentes características. El reciclaje de la roca se realiza en la propia obra, si tiene las proporciones adecuadas, o en instalaciones cercanas. Con ello se consigue un notable ahorro en costos de operación y transporte, contribuyendo con el cuidado del medio ambiente y el desarrollo sostenible”.
Optimizar Materiales
Apuntando a los Residuos de Construcción y Demolición (RCD), Timo Márquez, especialista en construcción sustentable y eficiencia energética, sostiene que “un manejo apropiado de éstos permite optimizar el uso de materiales a lo largo de su ciclo de vida. Por ejemplo, reducir la perdida de materiales, optimizar el tiempo de mano de obra y transporte durante el manejo de los residuos, además de crear y potenciar un mercado para el reúso o reciclaje de los mismos”.
En una columna en el portal Arquitectura & Energía, señala que entre los insumos que se pueden reusar o reciclar de la fase de construcción destacan el hormigón y la materia granular, tejas, madera, metales, mampostería, ladrillos, bloque, alfombra, plástico, papel, cartón y desechos verdes relacionados al movimiento de tierra.
Y en el caso de las demoliciones, el ingeniero indica que lo que se busca es un desmantelamiento ordenado de los componentes de la edificación. Agrega: “el objetivo primario es el reúso y luego el reciclaje. En esta etapa se retiran los materiales que pueden tener cierto valor en el mercado, como los metales (tuberías, conducciones...), madera (puertas, ventanas, suelos…) y algunos materiales cerámicos (tejas)”.
En relación a los edificios, un documento técnico del grupo de empresas de construcción y desarrollo inmobiliario Hildebrandt explica que es inevitable que en todo el ciclo de vida de éstos se generan residuos o materiales sobrantes: desde los trabajos iniciales de acondicionamiento de suelos hasta las demoliciones, obras que “deben gestionarse de forma adecuada. Para eso hay que considerar el equipo necesario para la recolección, los transportes, tipos de materiales y valores aproximados. Además, se deben estimar los beneficios económicos, sociales y ambientales que traerán estos esfuerzos”, asegura.
Añade que “la efectividad de las técnicas para su aprovechamiento dependerá de los mercados de cada uno los materiales, del manejo selectivo de los componentes y de los métodos empleados para la recuperación”.
Materiales y Métodos
En el mismo informe de Hildebrandt se expone que hay diversos materiales que pueden reutilizarse o reciclarse durante los procesos de construcción y demolición. A través de distintos procesos, estos residuos se pueden transformar para darles una nueva funcionalidad.
Revisa el artículo completo en Revista InduAmbiente N° 142, págs. 12 a 13.