Revista de descontaminación industrial, recursos energéticos y sustentabilidad.

El Turno de los Proveedores

El Turno de los Proveedores

¿Qué desafíos y oportunidades tiene la minería para mitigar las emisiones de GEI de alcance 3?



Si el proceso a la carbono neutralidad en el mundo equivaliera a completar un maratón, que considera 42 kilómetros, apenas estaríamos transitando los primeros metros.

Uno de los sectores productivos que inició esta carrera para disminuir considerablemente sus emisiones de carbono es el minero. En Chile, por ejemplo, la industria del cobre ha ido incorporando de manera creciente energías renovables no convencionales a sus instalaciones y procesos, lo que le está permitiendo reducir sus descargas de gases de efecto invernadero (GEI) de alcance 1 y 2. Las primeras están concentradas en las operaciones que son intensivas en el consumo de combustibles como el diésel, mientras que las segundas se vinculan, sobre todo, a procesos muy demandantes de energía eléctrica.

En contrapartida, la minería del cobre está al debe en el control de las emisiones de GEI indirectas de alcance 3 (EA3), que se originan en actividades propias de sus proveedores de bienes y servicios. Algunos ejemplos son la producción de insumos críticos, el transporte marítimo de materias primas y productos, los vuelos nacionales e internacionales, y las faenas desarrolladas por empresas contratistas.

El problema para el rubro es que más del 50% de estas emisiones proviene precisamente del segmento de proveedores. Así lo concluyó la "Guía sobre emisiones en la cadena de suministro de la minería: Línea base sectorial y propuestas para la acción", desarrollada por el Ministerio de Minería y la Corporación Alta Ley con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo.

Medidas Incipientes

El estudio constató que "mientras la gran mayoría de los esfuerzos han estado concentrados en estimar, definir metas de reducción e implementar acciones para mitigar las emisiones de GEI de Alcance 1 y 2 de la minería del cobre, la contabilización de las EA3 por la industria es mucho más incipiente y las medidas para reducirlas lo son aún más".

En todo caso, el anteproyecto de la Política Nacional Minera 2050 plantea la necesidad de establecer metas de emisiones alcance 3 y luego monitorear su cumplimiento.

Para avanzar, la Guía hace el ejercicio de generar un marco teórico sobre las EA3 en la minería del cobre. En esa línea, ofrece una caracterización de la organización industrial de la cadena de suministros de los principales insumos y servicios, proponiendo una herramienta de cálculo de emisiones de alcance 3 que recoja las particularidades y oportunidades de este sector en Chile.

"La finalidad es mejorar los datos disponibles a nivel país y disponer de información valiosa para los cálculos específicos y gestión efectiva de sus emisiones y potenciales efectos de distintas medidas en Chile, apoyando la toma de decisiones del gobierno, las empresas y otros agentes relevantes de la cadena de valor de la minería del cobre", asegura el informe.

Ahí se definieron las 15 categorías que componen el alcance 3 de la minería y se identificaron las actividades y/o insumos críticos en términos de EA3: el proceso de fundición y refinería, los aceros (bolas y revestimientos), los explosivos, los combustibles, el ácido sulfúrico, la cal y el transporte marítimo de productos.

El turno de los proveedores-03x550El transporte marítimo de materias primas y productos origina un volumen considerable de EA3.

Múltiples Oportunidades

A partir de los hallazgos, la Guía da a conocer los desafíos y oportunidades existentes para un trabajo colaborativo entre los actores relevantes de la industria minera del cobre que contribuyan a su descarbonización haciéndose cargo de las EA3. A saber:

• Metodológicas

- Definir formas de reportar las EA3: Para que atiendan los requerimientos de los grupos objetivos y permitan establecer comparaciones entre empresas y países sin cometer errores de doble o falta de contabilidad, sub o sobre estimando el nivel de emisiones.

- Desarrollar guías específicas para el cálculo de emisiones: Aunque en la minería del cobre se ha fomentado la medición, reporte y establecimiento de metas relacionadas con la huella de carbono, "resulta clave generar esfuerzos colectivos colaborativos que faciliten la discusión hacia una estandarización o desarrollo de una guía aplicada al sector, más aún si se trata de las emisiones de alcance 3", destaca el documento.

- Diseñar reportes con información desglosada: Las compañías mineras globales deberían reportar sus valores de EA3 de manera desagregada, ya que con frecuencia lo hacen sin un desglose por mineral, operación y país, lo que dificulta aislar la contribución del negocio de cobre a estas mediciones.

- Fortalecer capacidades para medir y gestionar emisiones: En la mayoría de los proveedores de la minería, que son numerosos y heterogéneos, no existen sistemas de medición y gestión de emisiones. De ahí la necesidad y oportunidad de fortalecer las capacidades internas en este sentido.

• De información

- Generar información de fuentes confiables: Si bien gran parte de la información relacionada a la medición de EA3 se considera sensible para el negocio, se debe generar información pública de fuentes confiables. La Guía plantea que "garantizar la confidencialidad de la información necesaria para aproximarse a la medición de las EA3, a partir de estadísticas del sector minero, es una oportunidad concreta para esta industria".

- Establecer una metodología estándar: Desarrollar una metodología que establezca claramente los límites de qué medir y cómo medir, y por consiguiente la sistematización de la información entre empresas, es una oportunidad de colaboración entre las compañías mineras para reportar y comparar las EA3.

- Contar con organizaciones que verifiquen la calidad de la información: Dada la heterogeneidad entre las compañías mineras y el incipiente desarrollo de capacidades para la medición de EA3, es clave la existencia de organismos independientes que verifiquen y certifiquen las emisiones reportadas por las compañías.

- Considerar factores de emisión locales: La práctica ideal sería usar factores de emisión propios de cada proveedor y, en su ausencia, utilizar aquellos que sean estándares e internacionalmente validados. Éstos, sin embargo, no necesariamente reflejan las condiciones reales bajo las cuales fueron producidos los bienes, ni tampoco las diferencias en los factores de emisión de los países de origen y sus respectivas matrices energéticas.

• De capacidades de las empresas

- Homogeneizar capacidades internas: Esto, dado que el conocimiento o capacidades internas asociadas al cálculo de las emisiones de GEI es heterogéneo, existiendo compañías con un alto entendimiento y conocimiento en el tema versus otras que descansan en consultores externos.

- Superar el rezago y la heterogeneidad en los proveedores: Se debe superar el desconocimiento generalizado sobre las emisiones de dióxido de carbono equivalente (CO2e) de sus productos que tienen las empresas proveedoras de la minería. "Algunas han avanzado hacia la determinación de la huella de carbono organizacional, lo cual es un avance, entendiendo que deben apuntar a cuantificar las emisiones de los productos que comercializan", indica el informe.

- Generar sistemas de información específicos: Las empresas tienen la oportunidad de hacerlo para registrar y gestionar la información relativa a las emisiones a lo largo de la cadena de valor. "Partir por sistematizar esta información, para luego realizar estimaciones de EA3 a partir de una metodología estándar a definir, es crucial", señala.

• De capacidades institucionales

- Generar capacidades en servicios públicos: El Estado debe desarrollar las capacidades al interior de sus órganos técnicos para que participen en las discusiones en igualdad de condiciones con los representantes de las compañías mineras.

- Definir metodología estándar: Debe generarse un esfuerzo sistemático y colaborativo entre el Estado y los actores de la cadena de valor para determinar una metodología estándar para la medición, reporte y verificación de las EA3 de la industria del cobre que permita llevar a la práctica su cálculo a nivel del país.

Artículo publicado en InduAmbiente 178 (septiembre-octubre 2022), páginas 76 a 78.