El bajo porcentaje de valorización sigue siendo un tema bien preocupante dentro de la gestión de los residuos en Chile. Según datos del Ministerio del Medio Ambiente, en 2019 se generaron cerca de 20 millones de toneladas de residuos en nuestro país, de los cuales el 96,9% era de tipo no peligroso (categoría que incluye a los residuos orgánicos), siendo revalorizado solo el 21% mientras que el 79% restante se depositó principalmente en rellenos sanitarios y vertederos, donde su descomposición produce gases de efecto invernadero (GEI) asociados al cambio climático.
Para mejorar ese desalentador panorama, Biogas Mostazal ofrece a la industria una nueva alternativa para la disposición final de sus residuos orgánicos de forma sustentable: una Planta de Digestión Anaeróbica multisustratos, autorizada para recibir y tratar diversos residuos orgánicos industriales y asimilables, transformándolos en biogás y biofertilizantes. Una opción que, según destacan, aporta significativamente a reducir la generación de GEI y a disminuir la huella de carbono de las empresas generadoras de residuos que recurren a este servicio.
Menos Calentamiento
Franco Caro, Gerente de Biodigestión de Biogas Mostazal, explica que el biogás generado en la mencionada planta "puede tener un contenido de metano (CH4) entre 50-70% en volumen, que al ser combustionado de manera controlada se transforma en dióxido de carbono (CO2), lo cual representa una ventaja frente a otras alternativas de disposición de los residuos, donde su degradación natural también puede generar metano que se vierte descontroladamente a la atmósfera".
Añade que el índice Potencial de Calentamiento Global (GWP) –que es una medida relativa sobre cuánto calor pueden atrapar los gases en la atmósfera en un determinado tiempo– de las moléculas de CO2 es de 1 mientras que el del metano es 21. "Por lo tanto, la combustión controlada del metano en nuestra planta disminuye 21 veces las emisiones de gases de efecto invernadero", concluye.
Caro también resalta que el biogás sirve para generar electricidad mediante combustión en motores de cogeneración, en este caso para una potencia de generación de 1,2 MWel. Y si esto se usa para sustituir combustibles fósiles, se puede traducir en otra reducción considerable de GEI y también establecer tarifas atractivas para la disposición de los residuos en la planta.
La planta de Biogas Mostazal trata residuos orgánicos sólidos y líquidos, ayudando a reducir la huella de carbono.
Biofertilizantes
El otro componente que Biogas Mostazal obtiene a partir de la digestión anaeróbica de los residuos es un biofertilizante que rescata el contenido de agua, la mineralización de los componentes orgánicos luego de su estabilización y microorganismos benéficos que en conjunto pueden biorecuperar suelos agotados. Este biofertilizante es rico en nitrógeno, fósforo, potasio y micronutrientes, y al reemplazar la aplicación de fertilizantes químicos también puede ayudar a disminuir la emisión de GEI, además de promover economía circular con industrias que tengan necesidad de fertilizantes y generen residuos orgánicos.
"En consecuencia, Biogas Mostazal ofrece una excelente alternativa para la disposición final de residuos orgánicos dentro de una economía circular, regenerando los residuos, solucionando problemas ambientales y produciendo energía limpia de origen renovable", asegura Franco Caro.
Más antecedentes sobre esta solución se pueden encontrar en: www.biogasmostazal.cl
Artículo publicado en InduAmbiente n° 182 (mayo-junio 2023), páginas 36 a 37.